En 2017, el Museo de las Artes Decorativas nos mandó una invitación a Anna y a mí para tener acceso libre de horario y costo a la exposición de “Christian Dior: El modisto de los sueños” en París, donde tuve la oportunidad de conocer a uno de los oficiales de costura, Jean “D”, quien platicó conmigo para, principalmente, ofrecerme un término correcto para calificar el trabajo que hacen los diseñadores sobre medida en México y el mundo, y no, no es Alta Costura.
Por Raphael Huerta
Texto original de la Edición 85/2017
Fotos de Vogue Francia y Telva
¿Recuerdan que les platiqué del tremendo calor que se sentía en la Ciudad Luz? Pues fue justo cuando buscaba aire fresco que me encontré con un joven alto y de piel tostada, rapado, vestido de negro con una bata blanca encima del look, fumaba. Me di cuenta de que a él lo había visto en un video “savoir faire” de Dior así que me acerqué para preguntarle y salir de dudas, me dijo que sí, invitándome a una demostración de costura y planchado en el “salón de moulages”.
Jean resultó ser nativo de California y entendía muy bien el español aunque no lo hablaba. Este es el resultado de tal entrevista:
RH: ¿Cuánto tiempo llevas trabajando en Dior?
Jean: He estado desde 2006, ha sido una experiencia tan estimulante como demandante, amo trajabar para Dior porque su historia es realmente rica. Yo vine a París para conocer la experiencia de vivir a la francesa, estaba en cursos de costura y llegué a los talleres de Dior casi por casualidad, porque acompañé al amigo de un amigo, quien vino a demostrar sus destrezas pero al final me eligieron a mí porque también pedí que me pusiera a prueba. Cuando me ofrecieron un lugar, llamé a mis padres y me dijeron “Ni se te ocurra volver aquí, te apoyamos con lo que sea”, y aquí estoy, 11 años después, sigo en Dior, mientras, el chico que mencioné antes, se fue a trabajar con un sastre de Savile Row en Londres.
RH: ¿Qué tiene Christian Dior que las demás maisons no poseen ni por error?
J: Sencillo, me encuentro trabajando en medio de 70 años de historia, todos somos parte de la maison y tenemos acceso a todo, no se nos excluye de ninguna manera, y en cuanto a moda, resulta fascinante que la prenda más emblemática de la casa, diseñada por el propio Monsieur Dior, ha sido reinterpretada por cada uno de los directores creativos que han pasado por la casa, desde YSL hasta María Grazia, me refiero a la Bar Jacket, la chaquetilla de tarde que se ve en la famosa fotografía del New Look. Además, de vez en cuando, algunas de nuestros mejores clientes acuden al atelier para conocernos, encargan sus prendas, que no son necesariamente de la colección, pero son hechas con las técnicas Dior.
RH: ¿Cuál sería tu respuesta para los detractores que afirman que la Alta Costura está a punto de morir?
JD: Si la Haute Couture no existiera, la evolución de la indumentaria no existiría; es la base de todo, desde la disciplina, la técnica, los detalles y la pasión por encima de cualquier cosa, representa un sector muy pequeño de la industria de la moda, por eso es que este servicio se considera de lujo, sin ésta no sabríamos cómo hacer las cosas correcta y manualmente, es un pilar para la historia del vestido, aunque muchos digan que no sirve para nada, no servirá para ellos porque tal vez no tienen acceso y si sí lo tienen, simplemente no les interesa, pero para nosotros es nuestro modus vivendi.
RH: En México, muchos diseñadores dicen crear vestidos de AC, pero ésta es una denominación de origen, o sea que debes gozar de ser reconocido por la Chambre Syndicale de la Haute Couture Parisienne como una casa de alta costura, en Italia la llaman Alta Moda, pero quizás puedas ayudarnos a establecer un término correcto para referirnos al trabajo de los modistos que trabajan sobre medida…
JD: Sé que en México el fenómeno/negocio de las quinceañeras se vende como “de alta costura”, pero es definitivamente imposible que lo sea, los diseñadores que trabajan sobre medida generalmente consiguen sus textiles en tiendas especializadas. Pero eso jamás va a suceder en Dior ni en ninguna otra casa de AC, son maisons que no salen a comprar textiles, los textiles vienen a éstas, en el caso de Dior, los textileros saben que no pueden surtir a otra firma con la tela que han desarrollado para nosotros. Entonces, si no son telas fabricadas exclusivamente para tu marca no es Alta Costura, si los bordados no están hechos a mano por bordadores acreditados por la Cámara Sindical de la Alta Costura Parisina, no es Alta Costura, hay tantas reglas a seguir. Ni en México ni en ningún otro país se hace Haute Couture, el término correcto sería Luxury Ready to Wear o si caso Prêt-à-Porter de Luxe, en español sería algo como Diseño de Lujo a la Medida ya que son prendas que se hacen con un determinado tiempo de por medio, no de forma masiva. Para que sea llamada Alta Costura tienes que estar establecido en París y hay una regla suprema que no todos los diseñadores pueden lograr:
“La Alta Costura tiene que ser tan hermosa por fuera como por dentro, es decir, el exterior del vestido debe ser bello, pero si lo volteamos para ver observar su construcción, deber ser más hermoso aún”.
